domingo, 16 de noviembre de 2008

"La broma" de Milan Kundera

Definitivamente no tenemos sentido del humor. Debido a nuestra educación no captamos las metáforas y nos lo tomamos todo al pie de la letra.
Kundera presenta a un individuo que deja una nota llena de ironía en una pizarra, una simple broma, la cual le arruinará la vida.
Loa mecanismos humanos, los mismos en casi cualquier parte, se ponen en marcha casi automaticamente. No soportamos a alguién que se acepta tal y como es, con sus miserias, pues nos recuerdan a nosotros mismos, con nuestras miserias. Pero aún hay más, nos recuerda que esa persona si se acepta, cosa que los demás no. A ese individuo hay que eliminarlo. Por supuesto como estamos en un mundo civilizado, hay que hacerlo racionalmente, demostrar, con axiomas podridos, que es una amenza para el colectivo.
Este es un mundo de niños que no crece para no asumir sus responsabilidades. Que no piensa racionalmente para no tener que ser consecuente y apagar el peso del posible remordimiento
El individuo individual, que no se pone el vestido de borreguito, debe saber lo que le espera. Debe saber que es mejor estar en la otra parte. Cada uno es como es.
Fantástica novela que nos dice como somos y seremos, sin remedio
Para los que tengan tentaciones de considerar la obra como una crítica al régimen, que gran palabra esa, comunista checo, decir que esos mecanismos de autodefensa humana, como yo los llamaría, a los que se refiere, tienen lugar en muchas latitudes, capitalistas o comunistas.
Si es una critica al comunismo, aqui hemos sido comunistas siempre.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¿Y dónde no fuimos comunistas?


La propia Eva por comunista nos condenó a tod@s....







Por cierto yo nunca me he visto los axiomas....