miércoles, 24 de diciembre de 2008

"El conformista" de Alberto Moravia

Todos somos producto de la educación recibida. Padres, escuela y sociedad- esta hoy día creo que es la que más aporta a nuestra educación, domesticación, con los mass media-. Una vez somos lo que somos vemos como podemos vivir con ello.
Moravia retrata la italia fascista a través de Marcello, personaje acomplejado que se abre paso en un mundo que raya la locura. Habrá quién vuelva a tener tentaciones de considerar la novela una denuncia al fascismo. Vale, puede que también, pero es fácil extrapolarla a cualquier otro tiempo. Como el nuestro, que casualidad.
A Marcello, joven italiano que quiere como todo el mundo ser alguién en su entorno, le han inculcado la filosofía del fascismo como medio de vida. En ese medio se abre paso, primero timidamente, luego a empujones. ¿Si nadie se preocupa por él, por qué él tiene que mirar por nadie? Los escrúpulos sobran. Siguen sobrando. Cuando es un individuo útil a su país, espía del estado, y cumple con su cometido de eliminación de subersivos, cae en la cuenta que ha ido demasiado lejos. Justo en ese momento se da cuenta que no hay marcha atrás. No es un traidor, y logicamente no le conviene serlo. Hay que seguir viviendo, y más con mujer e hija. Entonces él, todos los individuos en su situación se hacen más papistas que el papa. Si su vida es una locura de absurdo, y su mundo lo es también, necesita que su mundo no se hunda nunca. Si el fascismo cae, él se quedará como se suele decir en calzoncillos. Necesita la irracionalidad para que su vida tenga sentido. Si todos dicen que los burros vuelan el será alguién racional, equilibrado. Esto se extrapola a nuestro mundo de hoy. Salimos a absurdo que nos interesa por acción realizada. Nos han educado asi, no tenemos culpa y luego simplemente hemos de vivir.
En el mundo de ficción hay siempre algo de justicia, ciega eso si. ¿Por qué Marcello tuvo que pagar el haber recibido tal inculcación de ideas? No querrás que beba y ande derecho.
La no ficción es menos romántica incluso

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